Con un “mar de agua dulce” de 70 kilómetros de largo y 600 metros de ancho y el entorno reforestado, como va a quedar Ituango cuando se construya la represa, esta localidad y la zona podrían desarrollar un gran proyecto turístico, según llegó a plantear un directivo del Idea.
El sueño es promover deportes extremos, actividades lúdicas y pesca. Pero del entusiasmo a la realidad hay distancia. E Ituango poco se ha pensado como potencia turística.
El primero en admitirlo es el alcalde, Jaime Elías Montoya , quien sí tiene una idea, pero ni siquiera la ha desarrollado como proyecto.
“He pensado en un teleférico como el del Cañón del Chicamocha, que atraviese la represa, y uno a Ituango, Toledo y Briceño”.
Admite que su idea no la ha socializado y que habrá que empezar a buscar apoyos en el Gobierno central. Eso sí, no se imagina un aprovechamiento de la represa al estilo Guatapé, “porque allá el embalse está en el propio pueblo y acá está a 45 minutos, más cerca del corregimiento El Valle, de Toledo, y hay que reconocer que el orden público no es el mejor y eso aleja la gente”.
Por eso espera que los diálogos traigan la paz.
Si eso se logra, el Nudo del Paramillo le daría una posibilidad ecoturística a su municipio, uno de los más golpeados por la violencia de las Farc.
El concejal Francisco Bruno , sin embargo, piensa que el orden público es más un estigma: “Acá la gente puede venir y quedarse viviendo sin problema”. Admite que conoce la idea del teleférico, que está planteada en el Plan de Desarrollo, pero es algo muy costoso y aún muy incipiente. “Sería por ahí para 2018, acá todavía no hay quién invierta”, enfatizó.
Al alcalde Toledo, Juan Carlos Montoya, la idea del teleférico le parece un proyecto interesante para debatir.
Añadió que su pueblo puede desarrollar estaderos, hotelería y deportes de río, pero no hay nada concreto aún.
0 Comentarios