PROHIBIR LA VENTA DE CEMENTO EN ITUANGO
NOS HACE RECORDAR DEL HOMBRE QUE AL ENCONTRAR A SU MUJER
SIENDO INFIEL DECIDE SOLUCINAR EL PROBLEMA VENDIENDO EL SOFA
Busca "vender el
sofá". Es un chiste o cuento disparatado de un hombre que llega a su casa
más temprano que de costumbre y encuentra a su mujer en plena "labor"
con otro tipo en el sofá de la sala.Y "Soluciona" el problema vendiendo
el sofá. Traemos a cuento esta conocida historia, con lo que esta pasando en
Ituango con la prohibición por parte de las autoridades de vender cemento y que
el ciudadano tenga que ir a pedir permiso llevando fotos y hasta planos para
llevar dos o tres bultos de cemento, si esa fuera la solución hacia mucho rato
el gobierno Nacional habría tomado la decisión de cerrar una empresa como argos
que produce el 90 por ciento del cemento que se consume en Colombia y hasta
donde sabemos Argos paga impuestos, genera empleo y se considera una de las empresas orgullo de Colombia. Además
es grave para nuestro municipio que los comerciantes amenacen con dejar de
vender cemento por que están cansados de los allanamientos por parte de las
autoridades y de las capturas a que son objeto por que en sus tiendas venden
insumos para la coca (cemento) y como decía la noticia en la reciente captura
de 22 ciudadanos en ituango ( fueron decomisados 50 bultos de cemento y 24
bultos de urea ) lo anterior da rabia al leerlo pero también risaNo señores el problema no se soluciona con medidas tan
impopulares como esta que lo único que causa es malestar entre los habitantes
de Ituango y sobre todo entre los campesinos que ven como se les pone trabas
para llevar el cemento que va mejorar su calidad de vida ( arreglar el patio,
la unidad sanitaria, el benefiiciadero del café…etc)Amigos el problema de la
coca es un problema de oferta y demanda mundial y mientras haya quienes compren
(demanda) habrá quien les venda (oferta), pero si analizamos mas halla debemos
de mirar el abandono que por muchos años
ha tenido el gobierno central a la región de Ituango, principalmente la falta
de vías de comunicación (carreteras) como pretender que un campesino que esta a
dos y tres días de Ituango saque un carga de frisol o de maíz, le cuesta mas el
flete que lo que vale el producto en Ituango y eso con el riesgo de que no
encuentre quien se la compre, con lo anterior no queremos justificar ni estamos
de acuerdo con que nuestros campesinos siembren cultivos ilícitos los cuales no
le han traido sino problemas, lo que queremos llamar la atención a nuestra
autoridades es que el problema no es el cemento, el problema es el abandono del
gobierno hacia esas comunidades que muchas veces se han visto obligadas a
sembrar el único producto que les compran fácilmente y que es más fácil de
transportar.Pero finalmente y de
manera respetuosa lo que queremos decirle a nuestras autoridades es que un
problema mundial como el de las drogas no se soluciona restringiendo y
persiguiendo la venta de un producto licito como es el cemento, porque de lo
contrario estamos haciendo lo mismo del amigo que vendió el sofá y creyó haber
solucionado el problema
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