http://www.dsro.org/directorio/noticias-diocesanas/1041-la-vida-de-los-que-en-ti-creemos-senor-no-termina-se-transforma.html
Informamos con profundo dolor, pero en la esperanza cierta de la resurrección de la muerte repentina del padre Raúl Fernando Restrepo Ramírez, en el municipio del Santuario (Antioquia).
La vida de los que en ti creemos, Señor, no termina, se transforma; y al deshacerse nuestra morada terrenal adquirimos una mansión eterna en el cielo" (Prefacio I de difuntos).
Aún no tenemos información sobre el día, la hora y el lugar de las exequias. Oportunamente estaremos informando.
Como presbiterio y comunidad diocesana y en nombre del Señor Obispo Jorge Alberto Ossa Soto, ofrecemos oraciones por el Eterno Descanso del Padre Raul, rogamos a Dios lo tenga gozando se su presencia y nos fortalezca como hermanos en la fraternidad sacerdotal.
El padre Raúl Fernando Nació en Ituango el 2 de septiembre de 1958. Hijo de Feliz Emilio y María Susana. Realizo sus estudios secundarios en el Liceo Pedro Nel Ospina de Ituango y en el Seminario Menor Santa Rosa de osos; los eclesiásticos en el Seminario Mayor Santo Tomás de Aquino de Santa Rosa de Osos.
Fue ordenado Sacerdote por Mons. Joaquín García Ordoñez el 27 de noviembre de 1984. Trabajo pastoralmente como Vicario Parroquial de la Merced de Yarumal, de Entrerrios, la Catedral de Santa Rosa de Osos, Inmaculada de Amalfi y en el Carmen de El Bagre. Párroco de La Granja (Ituango), Nuestra Señora de los Dolores Tarazá y Remedios (Ant).
Descansó en la paz del Señor el día 2 de enero de 2013; sus exequias serán en el parque cementerio “Jardines Montesacro” (Cr 79 AA 44-67 Medellín) el día jueves 3 de enero de 2013, a las 11.00 a.m.
En nombre del Señor Obispo Jorge Alberto Ossa Soto y como presbiterio diocesano sentimos la muerte repentina del padre Raúl con la certeza de que la “vida de los que en Dios creemos no termina, sino que se transforma”, nos unimos en una ferviente oración por el eterno descanso del padre Raúl, implorando de Dios Todopoderoso recompense su amor, cariño, entrega, celo pastoral y le conceda el descanso eterno. Del mismo modo paz en su tumba y fortaleza espiritual para sus familiares, amigos, seres queridos y muchos feligreses que hoy lamentan y lloran su fallecimiento, al igual que la fortaleza para el presbiterio diocesano su familia sacramental.
0 Comentarios